Este 22 de julio, como cada año, celebramos el Día Mundial del Cerebro.
Ejercitar el cerebro es algo que debe hacer parte de nuestro cotidiano ya que sabemos que el deterioro de las capacidades cognitivas y funcionales es un proceso natural de envejecimiento, pero algunas personas pueden tardar más debido a la capacidad del cerebro adulto para “prepararse” para el proceso de envejecimiento.
A partir de los 25 años se comienza a perder volumen cerebral de forma natural, lo que provoca una decadencia progresiva de funciones como la agilidad mental, la memoria episódica o la capacidad para razonar. Por eso, es importante adoptar un estilo de vida que contribuya al fortalecimiento de la reserva cognitiva, especialmente a partir de los 50 años.
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La fecha fue definida por la Federación Mundial de Neurología (WFN), y cada año informe sobre la importancia de cuidar de nuestra salud cerebral y concientizar a la sociedad sobre cómo prevenir y cuidar el cerebro. Este año no podía ser diferente, pues con todo el estrés acumulado debido a la pandemia, las secuelas cerebrales estarán presentes por mucho tiempo. Pero la campaña de este año no trata sobre el Covid y sí sobre una enfermedad neurodegenerativa crónica muy conocida y mal diagnosticada: El Parkinson.
El lema es “Juntos para acabar con la enfermedad de Parkinson” que tiene como objetivo, además de concienciar sobre la enfermedad y la importancia de su diagnosticado precoz, intentar mejorar la calidad de vida de las personas que padecen esta enfermedad neurológica, así como la de sus cuidadores.
«Según datos de la Sociedad Española de Neurología (SEN), la enfermedad de Parkinson afecta, al menos, a unas 150.000 personas en el país y más de 7 millones de personas en todo el mundo, y cuya prevalencia continúa aumentando, principalmente por el aumento de la esperanza de vida. Y no solo afecta personas mayores, también a niños y adolescentes, pero es cierto que principalmente a personas mayores de 60 años. La enfermedad de Parkinson se produce por una serie de alteraciones en el cerebro que siguen siendo objeto de investigación.
En España, las personas pueden tardar entre 1 y 3 años para tener un diagnóstico correcto de Parkinson. Esto porque existe una identificación errónea sobre los principales síntomas de la enfermedad. Los problemas motores son los síntomas más conocidos y característicos de la enfermedad pero otros como: trastornos cognitivos, gastrointestinales, autonómicos, sensitivos o del sueño, además de depresión son también fuertes factores de la enfermedad y de 30-40% no presentan los temblores.
O sea que, tenemos un largo recorrido por delante, y si quieres animar a las personas a que se una en la lucha contra esta enfermedad, puedes usar el hashtags #WorldBrainDay y #WBD2020
Y además resaltamos que cada día es día de entrenar nuestra salud mental, adquirir nuevos conocimientos, practicar juegos mentales, realizar ejercicios de memorización, y otros muchos consejos que damos aquí en Reab.
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